
No te sienta el cole. Cada dos semanas tienes fiebre. Cuando no es un virus es otitis y cuando no algo de garganta. Se te ha juntado todo. El cole, los dientes, el frio que este invierno hace en Madrid...lo cierto es que andas un tanto desmejorado: no comes bien, tienes carucha, has perdido las roscas musleras....pero creces y creces; si sigues así superarás a Pau Gasol. ¿Que tal otro Pau en la NBA?. A tu abuelo le podría chiflar.
Mientras tu tratas de aclimatarte en tu cole, tu abuela ha recibido la noticia de que cierran el suyo después de 122 años. No se como transmitirte los sentimientos que esto me produce.
Recuerdo el día en que tu bisabuela me llevó por primera vez (1960). Yo tenía solamente 4 años. Me impresionaron las escaleras grandes, las que daban a la portería. Y la Capilla. ¡Cuantas horas pasé allí en los 13 años de colegio! En ella tomé la Primera Comunión. En ella aprendí a cantar gracias a la Madre Pilar Alcaud. En ella aprendí a rezar.
Mi primera profe fue la Madre Ana. La recuerdo pequeñita de tamaño. Nos hacía dormir la siesta que nunca dormíamos. Y me enseñó a leer. Debería existir un premio especial para las personas que enseñan a leer. Te aseguro que es un peñazo. Ya me lo contarás en unos años.
En esa época el cole de las Jesuitinas (que así se llamaba) era solo de niñas pero dejaban asistir a niños en párvulos (lo que ahora dicen guardería o jardín de infancia) pero ellos iban a otra clase, la de la Madre Rosa y solamente nos veíamos en el recreo.
En 2º grado estaba la Madre Carmen, en 3º la Madre Pilar y en 4º con su examen de Ingreso incluido, la Madre Quintina. Luego venía el Bachiller Elemental (4 años) con el examen de Reválida y, si lo aprobabas, seguía el Bachiller Superior (2 años) con otro exámen de Reválida. Y si querías ir a la Universidad el PREU con su prueba correspondiente. ¡Igualito que ahora, no te digo!.Ahora si no apruebas te hacen no se que curricular y puedes ir pasando de un curso a otro . Pero es que según anda la educación en este país lo difícil es no aprobar, tienes que ser un lerdo integral.
¡Cuantas monjas y profesoras/es recuerdo de todos aquellos años! La Madre Mª Cruz que nos enseñaba matemáticas y geometría. Era durísima. Todavía la puedo ver agarrada al armario de los abrigos gritando: ""¡la letra con sangre entra!""". Nunca hubo sangre, como puedes suponer, pero ¡daba un miedo que aprendimos matemáticas por narices!. La Madre Antonia que tenía una cicatriz en el labio y eso nos daba como cosa y que era la encargada de llamarnos en un aparte para ¿explicarnos? las cosas de la sexualidad cuando andábamos por los 13/14 años. ¡¡¡¡Jajajaa!!!! estaba mas nerviosa ella que nosotras. Siempre me pregunté por qué le encasquetaron esa labor. La Madre Petra que cuidaba la portería. La Madre Celia, la Madre Inmaculada, la Madre Pilar Arribas, la Madre Sagrario, la Madre Josefa.......y tantas otras...
Recuerdo especialmente a la Madre Pilar Alcaud, entre otras cosas, porque me llevaba bastante mal con ella y eso me costó mas de un castigo. Además de jugar al tenis y esquiar (que en esa época eran deportes de pijos pero que introdujo en el colegio creando sus respectivos equipos) dominaba el arte de la música. Tu abuela aprendió piano con ella. Entonces no existía Conservatorio en Segovia. Me quedaba despues de clase en el cole para aprender solfeo y piano. Luego nos examinábamos en el Conservatorio de Madrid. Cada año íbamos con la Madre Pilar a Madrid, nos alojábamos en la Residencia Universitaria de las Jesuitinas (c/ Ayala 42) y nos examinaban en lo que hoy es ¡El Teatro Real!. Además consiguió un coro colegial para la Capilla digno de haber grabado un disco. El mejor coro colegial que se ha escuchado nunca, te lo aseguro.
Es verdad que el coro lo formaba pràcticamente todo el alumnado. Nos metía en la Capilla. Por un lado las solistas ( unas 20 niñas que, a tres voces, cantábamos los solos) y, por otro, el resto de las alumnas cantando los "estribillos". Y no se salía del colegio hasta que a "ELLA" le parecía bien. Bien significaba perfecto. Era capaz de oír entre 200 voces una que desafinara o no llevara el compás. Y lo hacía notar dando una patada en el primer banco de la capilla y haciéndonos repetir desde el principio.
En mi época había internado en el cole y se podía comer allí. Recuerdo las meriendas. Pan con leche condensada al baño María y una naranja. Como tu abuela era externa no tenía merienda y envidiaba a las internas que se paseaban por el patio pequeño con ella.
Aparte de las asignaturas: matemáticas y geometría, ciencias naturales, geografía, lengua y literatura, historia, francés (ahora estudias inglés, las modas cambian), labores (¿que qué es eso? no tiene traducción, temo que a vosotros nadie os enseñará a coser un botón), trabajos manuales (hoy tecnología), urbanidad (tampoco tiene traducción porque hoy lo que aprenderás es educación para la ciudadanía que no tiene nada que ver) y Formación del Espíritu Nacional (esto tampoco tiene traducción pero es lo único en lo que sales ganando), hacíamos otras cosas que entonces no eran "extraescolares" sino escolares, o sea, estaban dentro del horario colegial aunque nos tuviéramos que quedar dos horas mas. Por ejemplo teatro. Todos los años se organizaba una fiesta al final del curso en el que interpretábamos distintos papeles. Tu abuela ha sido enano de Blancanieves, Tuno, duende entre las flores de Alicia en el país de las maravillas, chacha en una obra de Jardiel Poncela, danzante del grupo de danzas, Santa Ana el día de la Niña María, narradora de varias representaciones de teatro leído (eso creo que ya no se hace pero merece un post aparte), etc, etc, etc......
Y era divertido. Tal vez en esa época no me daba cuenta pero, con el tiempo, he visto que gracias a mi colegio de las Jesuitinas soy lo que soy. Y ahora que voy para mayor, ahora que ya soy abuela, estoy contenta. Todo lo que aprendí en mi cole, mis jesuitinas, me ha servido a lo largo de mi vida para ser mejor persona. Así que hoy, que cierran el cole, solo me queda dar las gracias y recordarle.
No se que van a hacer con el edificio pero, si puedo, cuando vayas a Segovia, te llevaré allí. Y te contaré todo esto y muchos recuerdos mas. Y te hablaré de las monjas y de las compañeras: Marisa Arias, Elena Sanz, Consuelo Madrigal, Ros Martin Burgos, Chonina, Mary Paz, Chelo, Mari Tere Martin Roige, Menena, Paloma Reguera, Sara Postigo, Gina,..........tantas y tantas que se me quedan entre los recuerdos.........cada una con sus cosas, cada una con su historia ¿donde estarán?
No te sienta el cole, de momento, pero te sentará. Y vivirás historias extraordinarias durante tu permanencia en el, y aprenderás, y harás amigos para toda la vida, y te divertirás......Y, sobre todo, eso espero, te enseñara a ser buena persona, responsable y feliz. Como a tu abuela le enseñó su cole, las Jesuitinas de Segovia.
Vamos a darle un aplauso tu y yo, abuela y nieto, en nombre de todas las generaciones que pasaron por él.
GRACIAS A MI COLE.