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21/8/09

Haciendo maletas


Voy a ir a verte. Ya que la montaña no viene a Mahoma, Mahoma va a la montaña. Mañana tomaré un avión y a media tarde estaré disfrutando de ti. Pero para eso he tenido que hacer la maleta.

Te aseguro que hacer las maletas puede hacer desistir a cualquiera de un viaje.
Primero tienes que pensar cuantos días vas a estar fuera de casa. Luego donde vas a estar. No es lo mismo ir a casa de alguien, en cuyo caso no tienes que poner en la maleta cosas tan tontas como gel de ducha o tijeras o una aguja e hilos, que ir a un hotel en cuyo caso tienes que prever un sinfín de necesidades básicas que el hotel no te va a suministrar.

Tampoco es lo mismo ir a un sitio durante quince días que ir a varios sitios en quince días. Por eso del clima (no es lo mismo Almeria que Segovia ni Canarias que Croacia) y por lo que vas a hacer en cada lugar (el vestuario de un barco no es igual que el de una ciudad o que el del campo). Y además tienes que tener en cuenta las actividades que vas a realizar. Por ejemplo, en este viaje voy a a asistir a una boda. Esto complica muchísimo las cosas porque tienes que añadir un traje especial con sus complementos especiales que DEBEN LLEGAR LO MENOS ARRUGADO POSIBLE.

Para no aburrirte, he tardado mas de cuatro horas en organizar mi maleta. Primero pongo encima de mi cama todo lo que creo que debo llevar y saco la maleta. Y entonces ¡HORROR!. Descubro que mi maleta es demasiado pequeña ( y eso que he sacado la grande) para la cantidad de cosas que creo imprescindibles. Aquí empieza la verdadera pesadilla de hacer la maleta. Hay que reducir material. Esta camiseta si, esta no, estos pantalones total no los voy a poner, este vestido se arruga mucho... quítalo, esta blusa se ensucia mucho... apártala, ¿para que te llevas tantas chaquetas?...fuera dos.....

Cuando has terminado de espurgar la ropa llega el tema de complementos. ¿Donde meto los zapatos? ¿Y los líquidos? ¡pero si no cabe ni un alfiler!.....

Y cuando te parece que ya todo esta dentro, al menos lo mas imprescindible, recuerdas: ¡Anda!, ¡el regalo de mi amiga x para mi nieto!...tengo que llevarlo. ¡Y la camisa que se dejó tu tío en el último viaje!....tengo que llevarla también.

Resumiendo: al final llevo dos maletas y estoy segura de que algo echaré de menos o se me habrá olvidado.

Y entonces he pensado en tu madre que, además de su maleta, tiene que hacer la tuya y ..¿tu calculas lo que es la maleta de un bebé? Escalofríos me da.

Pañales, biberones, ropa para calor, ropa para frío, chupetes, cuna plegable, cochecito de paseo, juguetes varios, esterilizador de biberones.....

Entiendo que la montaña no vaya a Mahoma. Con todo lo que me cuesta hacer la maleta es mucho mas fácil la mía que la tuya. Asi que allá voy. Con mis maletas a verte. Tu quédate donde estás. Ahorraremos a tu madre hacer tu maleta. Bastante tiene con cuidarte.

1 comentario:

daswiwi dijo...

Querida Renata, la verdad que te envidio (envidia sana, sabes que te quiero muchísimo). Ojalá pudiera yo tener esa vida tan complicada, y tener que pensar si pongo ropa en la maleta para ir a pasar unas vacaciones en el barco recorriendo Croacia o para pasar unos días en Almería. Disfruta de esas pequeñas-grandes cosas que te está poniendo la vida a tu alcance y dale un beso a tu nieto de mi parte.
Por cierto, lo de hacer la maleta es un verdadero calvario, por no decir un verdadero coñazo¡¡¡